Señales de la crisis del primer cuarto de vida + Tips de cómo enfrentarla

¿Tener que rendir dos o tres pruebas en un mismo día?

Sin duda todas alguna vez tuvimos que hacerlo en secundaria. Y nos parecía terrible; no sabíamos cómo manejar tanto estrés.

Luego, nos damos cuenta de que ese tipo de problemas, que para su momento eran los peores, no se comparan con las responsabilidades que adquirimos al llegar al primer cuarto de nuestra vida.

Alrededor de los 25 vivimos una encrucijada entre el acné y las arrugas: ya no somos adolescentes como para comportarnos de forma inmadura pero tampoco somos demasiado adultos como para contar con una amplia experiencia laboral.

Lo que antes nos parecía de vida o muerte, como encajar en una tribu urbana, se convierte en algo tonto a nuestros ojos, pues la presión social nos empuja hacia tener un trabajo “real”, una pareja “estable” y un buen ingreso mensual.

El punto positivo es que llega la tan anhelada independencia que nos da la oportunidad de conocernos mejor a través de momentos de soledad.

Con lo que tenemos que lidiar es que la independencia trae consigo nuevos retos: rentas que pagar, incertidumbre y, sobretodo, una constante búsqueda de estabilidad.

Además, empezamos a darnos cuenta de que ya no queda espacio para las excusas cómo “lo haré cuando sea grande”, pues el reloj marcó la hora; es el momento de hacer lo que siempre quisimos.

Pero no es tan fácil como suena, debemos luchar contra las inseguridades y dudas sobre nuestro valor propio. Dudas que estaban en las profundidades y salen a flote cuando empiezan a llegar oportunidades.

Nos enfrentamos a la que antes veíamos lejana: la crisis del primer cuarto de vida.

En este artículo encontrarás qué es esta crisis, señales para que puedas identificarla y recomendaciones para sobrellevarla.

¿Qué es la crisis del primer cuarto de vida?

Este término fue empleado por primera vez en 2001 por Abby Wilner en su libro «Crisis del cuarto de vida», que marcó el inicio de un milenio que no solo cuenta con la famosa crisis de mediana edad, ahora los más jóvenes viven la del primer cuarto de vida.

Aunque hace referencia a los primeros 25 años, esta se puede experimentar a partir de los 20 y hasta los 30 años, dependiendo de cada persona.

En este libro, la autora explica que es una etapa en la que «No hay certezas. Entras en un ciclo donde dudas mucho de ti mismo».

Desilusión hacia el área laboral

En esta etapa post universitaria, se espera que soltemos los trabajos de medio tiempo y consigamos un empleo donde podamos ejercer nuestra profesión.

Y no solo eso, deseamos que se nos exija, así como también que se nos permita escalar y crecer.

Sin embargo, cuando nos insertamos en un mercado laboral competitivo, nos damos cuenta que el título universitario no lo es todo, ya que es muy importante poseer otras habilidades que solo se perfeccionan a través de la experiencia laboral.
Inconformidad hacia los logros obtenidos

Los trofeos obtenidos hasta ahora nos parecen pequeños comparados con los que imaginamos tener a nuestra edad, además de enterarnos que nuestros amigos están logrando grandes cosas y acercándose a su meta.

Al procesar toda esta información, llegamos a la conclusión que “no es suficiente”, lo cual es parte de la inconformidad propia de la crisis del primer cuarto de vida.

En consecuencia, en esta etapa abunda la creencia de que no somos lo suficientemente buenas porque nuestra preparación académica o capacidades no han logrado posicionarnos en ventaja sobre nuestros ex compañeros.

Sin embargo, el hambre de éxito puede ser utilizada como motor, enfocando las acciones hacia una dirección concreta.

Lo cierto es que los tiempos de cada persona son distintos. Sólo porque todo parece ir sobre la marcha para varios, no indica que nuestra vida esté sin rumbo, tampoco debemos asumir tajantemente que ellos se esfuerzan más.

Preocupación por las finanzas personales

Las cuentas no se pagan solas. Independizarse implica una gran responsabilidad y planificación. Por ello, una de las grandes virtudes de las millennials es que cuidan de sus finanzas personales.

Asimismo, es común prestarle atención con lupa a los ingresos y egresos, en especial si somos emprendedoras o freelancers.

*Clic acá si quieres conocer cuáles son los errores que cometemos al emprender*

Principalmente porque en este rango de edad, es que comenzamos a adquirir deudas, nos enfrentamos al pago de impuestos, así como renta, transporte, comida y todos los gastos que implica vivir por nuestra cuenta.

Además, apenas estamos construyendo una estabilidad para nosotras mismas, pues lo que hagamos en estos años con nuestro dinero y tiempo determinará nuestro futuro.

El tip:

No permitas que el dinero se convierta en tu constante preocupación (o al menos inténtalo).

Por este motivo, en este punto es importante que adoptes el siguiente consejo: no gastes más de lo que tienes, si vas a adquirir una deuda asegúrate que sea para generar más ingresos.

No gastes como la dueña de la compañía si eres asistente; y crea un fondo de ahorros que puedas utilizar en caso de una emergencia.

Percepción de no estar avanzando

El mundo real parece no avanzar, incluyendo la profesión y las emociones. Además, en la universidad nos enseñaron a ejercer una carrera y no nos prepararon para enfrentar esta atmósfera de desconfianza que ahora vivimos.

Pero lo cierto es que es sólo una “Percepción” porque cada una de nuestras acciones diarias crean nuestro rumbo, a pesar de que no lo notemos. Solo debemos asegurarnos de que esas acciones nos estén llevando hacia dónde realmente queremos estar.

El tip:

Piensa que haber culminado la educación superior es un gran avance, lo cual te acredita para generar tus propios ingresos y saborear la independencia que tú hiciste posible.

Si sientes que te esfuerzas y no obtienes lo que tanto esperabas, recuerda que disfrutar el proceso es muy importante para que las cosas fluyan. Para lograrlo debes cultivar la paciencia.

Inseguridad acerca del futuro

La inseguridad acerca del futuro y el temor a no estar preparada para enfrentarlo, son propias de la crisis del primer cuarto de vida.

El tip:

Utiliza los recursos con los que cuentas, incluyendo la energía que tienes ahora para crear nuevos proyectos personales y profesionales.

Los retos que traen estos proyectos de corto, mediano o largo plazo, te ayudarán a descubrirte y conocerte mejor para crear una imagen y un legado paso a paso.

No permitas que cuando te encuentres en la mediana edad te embargue el arrepentimiento por aquellas cosas que no hiciste.

¿Te sientes identificada con estas señales? Cuéntame acá abajo en los comentarios cómo enfrentas los «veintitantos».

6 Comentarios Agrega el tuyo

  1. Manuel dice:

    Muy buen artículo aplicable a ambos sexos.

    Le gusta a 1 persona

    1. Así es! Nos aplica a ambos

      Me gusta

  2. María dice:

    Si tal cual lo que dice el artículo. Tengo 27. Y lo que me pasa es que cada entrevista que voy me quieren pagar migajas. Entonces de a poco empece a invertir en mi negocio. Y si, es lento el proceso de ser independiente, aunque creo que las cosas lentas se asientan sobre una mejor base. Y cada moneda que gano la ahorro. Todos los puntos coinciden conmigo. Gracias por esta info. Pensé que era yo nomas. Saludos! 😘

    Le gusta a 1 persona

    1. Así es, lo mejor se hace esperar! No te preocupes que no sólo eres tú, somos muchos los que nos sentimos de esa forma en esta etapa. Gracias por compartir conmigo tu opinión. En Instagram también comparto información y motivación @accordingtosofi Estaremos en contacto! 🙂

      Me gusta

  3. Gwendolyn Creamer dice:

    Hey, accordingtosofi!

    Do you not wish you could be Instagram cool?

    Ever thought about what it feels like to be an Instagram Influencer?

    Picture this: You wake up early Friday, even before your alarm does.

    You spring up to check your cellphone.

    Flipping to Instagram.

    Youare flabbergastered at what is waiting for you: Over 738 likes on one of your pictures! There, you can see a a huge amount of likes on your pictures–over 652 on a single photo alone.

    Heading to the kitchen, you put the kettle on for some tea and glance at your Instagram while you wait.

    Presto! Another 20 likes.

    And here comes another message. It’s from one of your many fans asking about your diet, and giving you daps on your third official month of eating healthy.

    As you read it, you begin to smirk. It is a really hot person, and they love your posts.

    While you sip your tea, you start typing up a response. But then your phone buzzes.

    It is another message coming in. You glance up at the clock–almost time for the gym. You will have to reply later.
    Listen, accordingtosofi, most people just aren’t in control of their life. Hell, they can’t even force themselves to eat a balanced breakfast, much less hit the gym.

    My job is to take people from Instagram nobody to Insta-celebrity. (It sounds foolish, but results don’t lie.)

    Now, what if you could raise your popularity by 100%, or 1000%?

    It’s not difficult to do, although almost no one does. Just hit up our website. There, you’ll learn how to garner Instagram followers and likes like mad…effortlessly.

    In just minutes after posting, we get your images piled with likes.

    If you are anything like our other customers, you’ll have a great chance of hitting the «Top Post» section in a very short time.

    This is all great, but you have actually got to put in the work to make it happen. OK, you got me, it is not real work.
    1. Check out https://jabbertune.club
    2. Plug in your Instagram username.
    3. The three pictures you posted last will get 10 – 15 likes. Just like that.

    Being a regular on that page will increase your growth 10x, easy. But if you want the fame, you’ve got to reach for it. Are you ready?

    Happy image-uploading.

    Me gusta

Deja un comentario